sábado, septiembre 02, 2006

TANTA TINTA TONTA: INFAMIA DE LA LITERATURA

Escribir columnas políticas desde la hiel, la estupidez y la ignorancia.

Amparado en tu fuero de editor vitalicio, reeditar un deplorable librito de "poemas" perpetrado a los 27.

Pretender la exclusión de quienes no siguen tu estúpido y estéril jueguito de serpientes y escaleras.

Engolar la voz en lugares públicos.

Retratarte con los escritores en los aeropuertos.

Exhibir tus borracheras a la luz del día. Ni que fueras Ruben Darío.

Colgarte del apellido de algún "ilustre" antepasado para vender un talento que nunca has tenido.

Pasar por maricón para que te crean como Truman Capote.

Inventar aventuras eróticas que jamás tuviste. Mendigar en el Congreso.

Descalificar los premios que nunca ganaste. Hacerle al "Manuel Acuña".

DEcirte poetisa o escritor policiaco si hace años que -huevón irredento- no escribes nada de nada.

Hablar de La Obra que jamás empezarás. Alabar a los vampiros del poder.

Impostar un "sentido trágico" a la aburrida comedia de tu existencia. Corromper a la juventud con droga.