martes, febrero 06, 2007

BOCAFLOJA

Amarse a uno mismo es el principio
de una historia de amor eterna.
Oscar Wilde

Sabiníssimo

Me alegro de que el sol haya salido

Me alegro de que el sol haya salido después de
tantas horas: me alegro de que los árboles se estiren como
quien sale de la cama; me alegro de que los carros tengan
gasolina y de que yo tenga amor; me alegro de que éste sea el día
26 del mes; me alegro de que no nos hayamos muerto.
Me alegro de que haya gentes tristes, como esa muchacha
que podría quererme si no quisiera a otro. Me alegro del
bueno de Dios que me deja alegrarme.
¡Tilín, Pirrín! Yo estoy alegre: quiero hacerlo todo. No
emborracharme con este vaso de tequila sino curar tu alma.
Pararme de cabeza para que rías. Sacarte la lengua para que
te aprietes la barriga.
Te muerdo debajo de la lengua, te ensalivo el pezón izquierdo,
y sé que estoy cerca de tu corazón, ciertamente.
Mira, día: vamos a ser buenos amigos. No daré nada a nadie.
Seré generoso: me arrodillaré en una esquina y extenderé mis
manos abiertas. Que me den un centavo el sol, el hombre que pasa,
las niñas que van a la escuela y hasta las viejecitas que vienen
de la iglesia. Quiero ser bueno, como el que acaba de salir de la
cárcel.

¡Salud, esqueletos!